Los pensamientos negativos irracionales son una realidad en los deportistas de alto rendimiento. Los mismos tienen consecuencias negativas en el rendimiento y peor aun cuando estos se manifiestan en el factor físico de este.
Me gustaría referirme brevemente a los errores de pensamiento; según el psiquiatra Aaron Beck (1979), todos los pensamientos negativos que no sean 100% racionales están perturbados por alguno de estos errores del pensamiento. Por lo tanto, ante la presentación de un pensamiento negativo, el deportista debe estimar si está cayendo en alguno de estos errores, con el fin de identificar ese pensamiento como irracional y dar una alternativa positiva e instructiva.
Un ejemplo de ello en el deporte es el error de pensamiento conocido como polarización; el cual es el clásico pensamiento de “todo o nada”, la tendencia a considerar que las cosas sólo pueden ser buenas o malas, blancas o negras, sin admitir intermedios.
Conozco el caso de un Taekwondista que llegó a disputar la final por el oro y la perdió. No obstante, alega que fue un fracaso total, a pesar de haber realizado combates extraordinarios para llegar ahí y con grandes remontadas con rivales de muy alto nivel.
Ahora bien, los deportistas deben de corregir estos errores de pensamiento por medio de la racionalización de este. Es un proceso por el cual el Coach Deportivo apoya al deportista élite a realizar el trabajo de racionalizarlo hacia una alternativa positiva e instructiva.