Coaching deportivo y entrenadores

El coaching deportivo también está dirigido a optimizar el rendimiento del entrenador para dotarle de habilidades, conocimientos y técnicas que le permitan ser, él mismo, coach de sus propios pupilos. El caso más reciente es de Joaquín Valdez como miembro del equipo multidisciplinar de Luis Enrique en la Selección de Fútbol de España.

En nuestra región podemos ver en muchos casos que el entrenador es un exjugador o es un conocedor y esto no es suficiente; ¡¡¡debe de dominar con maestría competencias!!!

Alguna de estas competencias es: la habilidad de motivar, la comunicación, la toma de decisiones, la coordinación, la solución de conflictos, la evaluación objetiva y el autocontrol.

Los entrenadores deportivos que quieren marcar la diferencia en un mercado profesional y aspiran a dirigir grandes equipos; deben dominar las destrezas de un coach.

Ahora bien, en este artículo me referiré exclusivamente a las conductas propias del entrenador.

Primero que todo tomaremos dos factores en cuenta;

  1. La influencia de las conductas del entrenador en la motivación y la autoconfianza del equipo.
  • Las necesidades psicológicas del entrenador, quien debe influir psicológicamente en los jugadores y afrontar él mismo, de manera adecuada, situaciones de elevado estrés.

En la observación sistemática de las conductas de los entrenadores, éstas se han agrupado en doce categorías. Solo me referiré a dos en este artículo.

Ánimo contingente al error: el entrenador anima al deportista cuando éste acaba de cometer un error.

Situación   Un central (fútbol) acaba de perder el balón y por poco termina en gol del rival.
Ejemplo     El entrenador exclama, bien, ¡vamos! Queda tiempo de sobra.  

Instrucción técnica contingente a un error: el entrenador explica al deportista por qué ha cometido ese error y cómo puede subsanarlo.

Situación   Un jugador de fútbol (volante) está perdiendo los balones.  
Ejemplo   El entrenador le indica la solución al error, diciéndole la corrección (jugar a dos toques el balón).  

Durante el programa de coaching, el psicólogo deportivo debe evaluar al entrenador en el manejo eficaz de cada una de estas conductas. De las incongruencias en el manejo de estas doce categorías, se derivarán los objetivos de trabajo principales para mejorar el grado de influencia que tiene el entrenador en el equipo y su propio funcionamiento psicológico.